La vida privada del oso frontino está envuelta de misterio. Es una criatura sigilosa que evita al máximo el contacto con los humanos. Su presencia fantasmal pasa casi desapercibida en los bosques nublados y páramos que constituyen su hogar natural en los Andes Venezolanos. Por esta razón, en lugar de plantearse la observación directa del oso, los científicos usualmente deben invertir largas faenas recorriendo las montañas en la búsqueda de rastros. La identificación de señales de actividad ha servido para conocer la historia natural del oso, pero desde hace pocas décadas unos dispositivos tecnológicos están ayudando a conocer mejor algunos secretos del gran plantígrado. Nos referimos a las cámaras fotográficas de activación automática (llamadas cámaras-trampa), las cuales actúan como vigilantes, registrando todo el tiempo en fotos y vídeos las características y comportamientos de los osos presentes en un área. Haz clic sobre la imagen que quieras ver más grande . En el año 2003,
¡Hoy es una fecha especial! Es tiempo para celebrar la existencia de unas criaturas fascinantes... es el ¡ Día Mundial para la Protección de los Osos!. Haz clic sobre la imagen que quieras ver más grande. Esos animales gordos y peludos siempre nos han hecho volar la imaginación, despertando admiración y en algunas ocasiones temor. Osos de peluche y personajes de caricaturas nos acompañan desde la infancia porque son símbolo de amor, gracia y ternura. Pero más allá de la fantasía, en la realidad los osos son criaturas fascinantes, valiosas por su importancia ecológica y cultural, están amenazados de extinción y merecen vivir en este planeta que compartimos desde un tiempo remoto. Hablamos de “osos” porque no se trata de uno solo sino de 8 especies que habitan diferentes lugares de la Tierra. Uno de ellos es blanco como la nieve y vive en los gélidos paisajes del polo norte; por eso lo llamamos “ oso polar ”. Otro, conocido como “ oso pardo ”, es de color marrón y habita en muchos