El oso frontino sigue siendo uno de esos animales misteriosos de los bosques nublados andinos. Muy pocas personas han tenido la fortuna de verlo en su medio natural. Esta condición se debe a que es un animal sigiloso, tímido y evasivo, aunque también vale considerar que ya quedan muy pocos individuos silvestres y eso influye en que sea tan extremadamente difícil encontrarlo.
El pasado mes de marzo de 2008, durante una travesía en bicicleta por la selva nublada de la vertiente sur del Parque Nacional Sierra Nevada (Venezuela), un grupo conformado por Luis Ricardo Rosario, Daniel Souto, Luis Tazcón y Tomas Medina, se encontró con un oso frontino que curiosamente no se alejó de ellos mientras lo observaban. Este encuentro, del todo inusual, demostró una conducta pacífica del oso quedando en evidencia que ellos no atacan a la gente, salvo en casos de extrema amenaza. El oso era bastante grande y se mantuvo montado en un árbol por más de media hora, tiempo que permitió filmarlo brevemente para quedar un testimonio fiel del encuentro. Este video fue donado a la Fundación AndígenA y ahora forma parte del archivo documental sobre esta especie en Venezuela. Hemos querido compartirlo con todos y todas para que reconozcamos la magnificencia de esta maravillosa criatura, motivo de orgullo andino y símbolo de nuestro compromiso con la conservación del patrimonio natural de Los Andes.
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